Los patos prefieren permanecer en el agua que en la tierra y, a menudo, buscan alimento en grupos más grandes para protegerse de las aves rapaces. Estas aves están equipadas para todas las temperaturas y siempre se aseguran de que sus plumas estén bien engrasadas y, por tanto, repelentes al agua. Debajo hay una capa aislante. Esto significa que estos omnívoros pueden encontrar alimento en todas las estaciones. Para facilitar la alimentación, muchos patos tienen picos especializados con ranuras o filtros llamados laminillas. Los patos anidan cerca de las orillas y les gusta esconderse entre los arbustos.
Dato curioso: sólo las hembras graznan.